Entramos en la época estival y por ello son cada vez mayores el número de estrenos de películas de acción, ligeras y entretenidas...los llamados Blockbusters de Hollywood. A la gente parece que le gustan las explosiones, la acción y las chicas, por lo que una secuela de la película de las tortugas ninja de 2014 se veía venir. Analizamos lo que ha dado de sí esta segunda entrega de la franquicia.
Esta secuela, producida por Michael Bay y dirigida por Dave Green, cuenta en su reparto con nombres como Megan Fox (Jennifer´s body), Will Arnett (Men in Black III), Laura Linney (Mr. Holmes) o Jeremy Howard (El Grinch) entre otros, además de la inclusión de nuestro Arrow televisivo Stephen Amell. En esta ocasión, Las Tortugas Ninja vuelven a salir de las sombras para
proteger la ciudad de Nueva York del malvado Shredder y sus nuevos
aliados.
Partiendo de la base de que a esta película no se la puede exigir mucho, ni un argumento fuera de lo común o unos guiones espectaculares (¡que diablos, son tortugas ninja que comen pizza!), después de verla, me ha pasado igual que con la primera parte: la olvidaré a los diez minutos, pero no por ello me ha parecido una película lamentable. ¿Es buena? En absoluto, pero tampoco lo pretende. Hay acción, chicas, chascarrillos y efectos especiales, todo ello llevado de una manera relativamente correcta, por lo que la película cumple con lo que ofrece.
Nos encontramos ante unos 100 minutos de entretenimiento sencillo, que busca satisfacer a un público sencillo con una historia que repite la fórmula básica de este tipo de adaptaciones: villano que regresa con más fuerza y un plan más ambicioso y que le pondrá las cosas más dificiles a nuestros héroes, que tendrán sus propias discusiones, para finalmente unirse en la batalla. Sí, lo de siempre, pero no resulta aburrido en exceso. Presenta además nuevos personajes como son nuevos villanos, donde destaca el humor de Beeboop y Rocksteady, que se roban las escenas en las que salen, además de la introdución de Casey Jones, interpretado por Stephen Amell. Si bien su caracterización deja mucho que desear, es una introducción medianamente satisfactoria que cumple su función con solvencia. El resto del reparto y sus personajes funcionan, aunque el villano de la función apenas aparece y apenas complica la vida a nuestros héroes, siendo los secuaces de estos quienes tienen más escenas.
Se trata, en definitiva, de un festival de efectos digitales, explosiones, peleas y pizza, con este nuevo enfoque que están dando a las tortugas. Habrá que esperar a ver si hay una tercera parte y como continúan las aventuras de estas cuatro tortugas hermanas.
Mi nota, en esta ocasión, es un 5/10.
Aquí tenéis el trailer:
Partiendo de la base de que a esta película no se la puede exigir mucho, ni un argumento fuera de lo común o unos guiones espectaculares (¡que diablos, son tortugas ninja que comen pizza!), después de verla, me ha pasado igual que con la primera parte: la olvidaré a los diez minutos, pero no por ello me ha parecido una película lamentable. ¿Es buena? En absoluto, pero tampoco lo pretende. Hay acción, chicas, chascarrillos y efectos especiales, todo ello llevado de una manera relativamente correcta, por lo que la película cumple con lo que ofrece.
Nos encontramos ante unos 100 minutos de entretenimiento sencillo, que busca satisfacer a un público sencillo con una historia que repite la fórmula básica de este tipo de adaptaciones: villano que regresa con más fuerza y un plan más ambicioso y que le pondrá las cosas más dificiles a nuestros héroes, que tendrán sus propias discusiones, para finalmente unirse en la batalla. Sí, lo de siempre, pero no resulta aburrido en exceso. Presenta además nuevos personajes como son nuevos villanos, donde destaca el humor de Beeboop y Rocksteady, que se roban las escenas en las que salen, además de la introdución de Casey Jones, interpretado por Stephen Amell. Si bien su caracterización deja mucho que desear, es una introducción medianamente satisfactoria que cumple su función con solvencia. El resto del reparto y sus personajes funcionan, aunque el villano de la función apenas aparece y apenas complica la vida a nuestros héroes, siendo los secuaces de estos quienes tienen más escenas.
Se trata, en definitiva, de un festival de efectos digitales, explosiones, peleas y pizza, con este nuevo enfoque que están dando a las tortugas. Habrá que esperar a ver si hay una tercera parte y como continúan las aventuras de estas cuatro tortugas hermanas.
Mi nota, en esta ocasión, es un 5/10.
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